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Una de las claves del éxito de Kerman Lejarraga es su cabeza. El vasco se toma cada combate igual que un Mundial y no pierde el foco con el futuro sin asegurar el presente. Lo lleva haciendo así desde que debutó hace más de cinco años. Tras retener el pasado sábado el Europeo del peso welter, el vasco se ha puesto a las puertas de todo. Con un récord de 27-0 (22 KO), dos Campeonatos de Europa, tres Campeonatos Internacionales WBA, un Nacional y ranqueado en los cuatro principales organismos mundiales... el futuro pinta bien, pero el welter es un peso muy competido y lo sabe. Crawford, Spence, Thurman, Pacquiao... serían sus rivales potenciales y él lo tiene claro. Calma.
"Cuando miro la lista de campeones, o de ranqueados, y veo que mi nombre está ahí ya es un motivo de orgullo. Es la mejor de las motivaciones para seguir trabajando con más fuerza. Seguir la misma línea que hasta ahora es lo que me puede acercar al título, pero paso a paso. Ellos son unos grandísimos campeones y a mi me quedan muchas cosas por hacer antes de pensar en el mundial", reconoce sin titubeos en una entrevista facilitada por MGZ Promotions. Pese a esa tranquilidad, obviamente, Kerman sueña con ser campeón. "Todo boxeador sueña con eso, con hacer las cosas bien para poder disputar el título. Es el gran sueño y está al alcance de muy pocos. Afrontar un mundial es muy difícil porque el campeón, por lo general, siempre será alguien con mucho talento. Si te soy sincero creo que el mejor camino al título es hacer las cosas como hasta ahora", añade.
volvió a vivir una gran noche de boxeo en Bilbao. El campeón de Europa del peso welter, Kerman ‘El Revólver’ Lejarraga, defendió por primera vez su cinturón ante su fiel público. El BEC vibró con la aplastante victoria del boxeador más taquillero de España, un púgil con el carisma de los campeones de antaño.
El combate se empezó a disputar en el pesaje del viernes, previo a la velada. Dar el peso estipulado, suele ser, para la mayoría de los boxeadores, un proceso complicado. Hay que llevar una dieta estricta adaptada a cada momento del campamento de entrenamiento, sufrir entrenando, sudar el exceso de peso… una tarea nada fácil, teniendo en cuenta que el día después tienen que estar al 100% sobre el ring.
Europa se le queda pequeño, es un hecho, y Lou DiBella, su promotor en Estados Unidos, ya ha apuntado a que su próxima pelea será allí. "Me emociona saber que quieren que mi carrera siga en Estados Unidos, claro, pero hablaré con mi equipo para evaluar cuál es la mejor decisión. La meca del boxeo está allí, pero no puedes imaginar lo bonito que es salir a pelear ante un BEC lleno y entregado. A ellos les debemos traer a casa estos combates. Lo que viví el sábado no se me olvidará nunca y me encantaría vivir más noches así", apunta. La duda está ahí y las especulaciones sobre su futuro tras la exhibición ante Gavin son alta, él vuelve a poner la coherencia. "Esta semana o la próxima me sentaré con mi equipo para estudiar las opciones que tenemos. Siempre seremos un equipo que irá de la mano tanto en lo bueno como en lo malo", concluye. Paso a paso, esa es la receta de Kerman Lejarraga.
El primero en subirse a la báscula fue el retador británico Frankie Gavin, sabiendo que límite del peso welter es de 66,7kg. En caso de excederse de peso no podría optar al título continental y el combate podría suspenderse. Gavin se excedió en 2 kg, quedándose más cerca del peso superwelter que del welter. El campeón de Morga dio el peso correctamente y aceptó la contienda a pesar de la ventaja física del aspirante. No quería dejar a su público sin la fiesta del sábado.
El público acudió en masa para ver al Revólver, uno de los mayores pegadores del momento. Hasta el momento, tenía un palmarés inmaculado de 26 victorias con 21 KO’s y ninguna derrota. Se proclamó campeón de España e Internacional antes de derrotar al también británico Bradley Skeete, por KO en el segundo asalto hace 7 meses, para convertirse en el flamante campeón de Europa. Su rival con 26 victorias y 3 derrotas, también ganó a Skeete en 2014 por puntos, además de haberse proclamado campeón del mundo en boxeo amateu
Sobre la media noche, el maestro de ceremonias llamó al cuadrilátero a los contendientes. El primero en salir al ring fue el retador Frankie Gavin, que se vio las caras con un público que venía caliente por su negligencia en el pesaje. Kerman entró después, con paso firme, y con la mirada puesta en su objetivo. El británico parecía impasible ante el hostil ambiente y comenzó controlando los dos primeros asaltos del combate. Lejarraga, protegido en su guardia alta, analizó minuciosamente la guardia zurda de su rival mientras bloqueaba las acciones de su adversario. En el tercer episodio, el púgil de Morga empezó a cargar las balas en su revólver, avisando a Gavin de lo que iba a pasar. Fue en el siguiente round, cuando soltó todo su arsenal sobre el retador, dejándole tocado en varias ocasiones antes de clavarle la estocada final. Upper de derecha para subir la guardia y gancho al hígado con la izquierda, la fórmula perfecta para terminar la corta pero dolorosa aventura del retador inglés.
El difícil peso welter
Kerman Lejarraga volvió a imponer su ley sobre el ring para defender con éxito el campeonato de Europa, que empieza a parecer que se le queda pequeño. Ya está ranqueado en lo más alto de las listas de su categoría y todo apunta a que 2019 podría ser el año de la disputa del fajín mundialista. El salto a la élite del peso welter es una apuesta arriesgada, si nos fijamos en los boxeadores que podrían obtener esta denominación: Manny Pacquiao, Terence Crawford, Keith Thurman, Errol Spence Jr,…; pero hay que confiar en que nuestro campeón se hará un hueco entre ellos.
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